Este estudio evaluó los impactos económicos y ambientales a nivel de finca por el uso de maíz genéticamente modificado (GM) en Vietnam (resistente a las plagas de lepidópteros del maíz y tolerante al herbicida glifosato).
Se basó en gran medida en una encuesta a agricultores realizada en 2018-19. Las variedades transgénicas superaron a las variedades convencionales en términos de rendimiento en + 30,4 % (+ 15,2 % si la comparación de rendimiento es solo con las variedades convencionales equivalentes de rendimiento más cercano) y redujeron el costo de producción entre 26,47 dólares EE.UU. por hectárea y 31,30 dólares por ha.
Por cada US $ 1 adicional gastado en semillas transgénicas en relación con las semillas convencionales, los agricultores obtuvieron entre US $ 6,84 y US $ 12,55 adicionales en ingresos adicionales. La tecnología del maíz transgénico también redujo el uso de insecticidas y herbicidas. La cantidad promedio de ingrediente activo herbicida aplicado al área de cultivo transgénico fue 26 % menor (1,66 kg por ha) que el valor promedio para el área de maíz convencional (2,26 kg/ia por ha) y en términos del impacto ambiental asociado del El uso de herbicidas, medido por el indicador del Cociente de Impacto Ambiental (EIQ), fue inferior en un 36 % al valor promedio aplicable al área de maíz convencional.
Los insecticidas se utilizaron en una superficie de cultivo transgénica significativamente menor y, cuando se utilizaron, en cantidades más pequeñas. La cantidad promedio de insecticida aplicado al cultivo de maíz transgénico fue significativamente menor en un 78 % (0,08 kg / ai por ha) que el valor promedio para el área de maíz convencional (0,36 kg/ai por ha) y en términos del impacto ambiental asociado del uso de insecticidas, medido por el indicador EIQ, también fue menor en 77 % que el valor promedio del maíz convencional (14,06 por ha).
La evidencia identificada en la encuesta de fincas muestra que la adopción de maíz transgénico en Vietnam ha brindado importantes beneficios socioeconómicos a las fincas que han utilizado la tecnología. También ha habido beneficios ambientales más amplios (para la sociedad) asociados con cambios en las prácticas de control de malezas y plagas que han reducido la carga ambiental asociada con el uso de pesticidas en el maíz.
Fuente: AgroAvances